El anuncio fue hecho por el ministro de Salud, Olivier Véran, resaltando la recomendación de seguir utilizando el implemento sanitario. La medida, que se aplicará a partir del lunes 16 de mayo, se da en un contexto de disminución progresiva de infecciones.
A partir del lunes 16 de mayo deja de ser obligatorio el uso de la mascarilla en el transporte público francés en un momento en que «la situación epidémica mejora», según dijo el ministro de Salud, Olivier Véran.
En este sentido, el número de casos ha disminuido, tendencia que las autoridades sanitarias esperan siga extendiéndose en los próximos meses.
«Llevar mascarilla sigue estando recomendado, pero no es obligatorio», destacó Véran.
«El escenario más probable», según el ministro, es que el coronavirus no desaparezca, pero teniendo en cuenta los niveles de protección de los franceses, gracias a la inmunización por las olas sucesivas de contagios y a la aplicación de vacunas, se puede adoptar esta medida.
A pesar de la nueva directriz, seguirá vigente el pase sanitario en hospitales y residencias de ancianos, así como la mascarilla obligatoria en estos establecimientos.
El retiro progresivo de las restricciones
Cada vez son más las naciones que se suman a la relajación de las medidas contra el Covid-19, fundamentalmente en territorios que tienen un alto porcentaje de personas vacunadas.
El ministro Véran indicó, respecto a si se deberá llevar mascarilla en los vuelos internacionales en dirección o procedentes de países donde las restricciones continúen, que las compañías aéreas serán las que determinen ese aspecto.
Hasta el momento, 11 naciones del bloque europeo han levantado las restricciones en el transporte público.
En Europa, algunas líneas aéreas han suavizado el uso de la mascarilla dependiendo el destino. Tal es el caso de British Airways y Virgin Atlantic, con sede en el Reino Unido o de la aerolínea Easy Jet y la neerlandesa KLM, entre otras.
Reuters y EFE