El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó el miércoles al mandatario ruso, Vladimir Putin, de «criminal de guerra» por su invasión de la vecina Ucrania.
«Creo que es un criminal de guerra», le respondió Biden a una periodista que lo interrogó en la Casa Blanca a la salida de un evento dedicado a la lucha contra la violencia doméstica.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que Biden estaba «hablando con el corazón» después de ver imágenes en la televisión de «acciones bárbaras de un dictador brutal a través de su invasión de un país extranjero».
Psaki precisó que «un procedimiento jurídico (estaba) todavía en curso en el Departamento de Estado» con respecto a una calificación legal de «crímenes de guerra» cometidos por Rusia en Ucrania.
Hasta ahora, ningún funcionario estadounidense había utilizado públicamente los términos «criminal de guerra» o «crímenes de guerra», a diferencia de otros estados u organizaciones internacionales.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, por ejemplo, calificó la semana pasada de «atroz crimen de guerra» el bombardeo ruso de un complejo que albergaba un hospital de maternidad y un hospital pediátrico en Mariúpol, que dejó tres muertos, entre ellos una niña, y 17 heridos.
«Lo que ya hemos visto del régimen de Vladimir Putin con respecto al uso de municiones lanzadas sobre civiles inocentes, esto ya constituye en mi opinión un crimen de guerra», apuntó el primer ministro británico, Boris Johnson, el 2 de marzo.
Por otra parte, el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, que investiga denuncias de crímenes de guerra en Ucrania, visitó ese país y habló por videoconferencia con el presidente ucraniano,
Volodimir Zelenski, informó este miércoles la institución.
Putin ordenó una invasión a gran escala de Ucrania hace tres semanas, diciendo que Rusia quiere forzar el desarme de Ucrania y derrocar al gobierno prooccidental.
Las fuerzas armadas de Ucrania, con enorme flujo de armas de países occidentales, se han defendido, deteniendo en gran medida el avance ruso. Las tropas rusas recurrieron cada vez más a los bombardeos de civiles.
Más de tres millones de personas han huido de Ucrania desde el comienzo de la invasión, según la agencia de migración de las Naciones Unidas, la OIM.
AFP