Un cinematográfico asalto sacudió el aeropuerto Almirante Padilla de Riohacha, en La Guajira, Colombia, el pasado 9 de abril. Un grupo de al menos 12 hombres armados irrumpió en la pista de aterrizaje, donde interceptaron un camión de valores que estaba cargando dinero en un avión comercial con destino a Bogotá. El violento episodio, que incluyó disparos y una persecución, dejó a los pasajeros y trabajadores en estado de pánico.
Los delincuentes, que llegaron en camionetas tipo Toyota Prado, lograron acceder a la zona restringida del aeropuerto tras vulnerar la seguridad. Una vez en la pista, intimidaron al personal del camión de valores y se apoderaron de varias tulas llenas de dinero. Aunque el monto exacto del robo no ha sido confirmado, se estima que supera los 16.000 millones de pesos. En su huida, los asaltantes abandonaron e incendiaron uno de los vehículos utilizados, dejando billetes quemados en el lugar.
LEA TAMBIÉN: Fallece Rubby Pérez tras el colapso del techo de una discoteca en República Dominicana
El incidente obligó a la suspensión temporal de las operaciones aéreas, mientras las autoridades desplegaban un operativo para capturar a los responsables. Hasta el momento, se han reportado dos capturas y la recuperación de una parte del botín. Sin embargo, la mayoría de los asaltantes lograron escapar, lo que ha generado cuestionamientos sobre las fallas en los protocolos de seguridad del aeropuerto.
El alcalde de Riohacha, Genaro Redondo, expresó su preocupación por el uso de vuelos comerciales para transportar grandes sumas de dinero, calificándolo como un riesgo innecesario. «Es urgente revisar los procedimientos y garantizar que este tipo de traslados se realicen en condiciones más seguras», señaló. Por su parte, la Aeronáutica Civil anunció que reforzará las medidas de seguridad en la terminal aérea.
LEA TAMBIÉN: China reducirá la proyección de las películas de EEUU en medio de tensiones de ambos países
Este robo ha desatado un intenso debate en Colombia sobre la creciente audacia de los grupos criminales y la necesidad de fortalecer la seguridad en infraestructuras críticas. Las imágenes del asalto, captadas por cámaras de seguridad y testigos, han circulado ampliamente en redes sociales, aumentando la presión sobre las autoridades para resolver el caso.
Mientras tanto, la comunidad de Riohacha sigue conmocionada por este hecho sin precedentes, que pone en evidencia las vulnerabilidades en la seguridad aeroportuaria. Las investigaciones continúan, y las autoridades esperan dar con el paradero de los demás implicados en este audaz y violento robo.