Entre la tarde del miércoles y la mañana del pasado jueves se reportaron al menos 30 muertos en la Franja de Gaza, producto de una serie de ataques israelíes agravando aún más la situación humanitaria en esa región, según confirmaron fuentes locales a EFE. Al menos ocho personas, entre ellas mujeres y niños, murieron en un ataque aéreo israelí contra Al-Mawasi, una localidad en el oeste de Jan Yunis, designada previamente como «zona segura» por Israel.
Videos difundidos en redes sociales capturan la magnitud del desastre y la angustia de los habitantes de Gaza, quienes afirman que no recibieron advertencias antes de los ataques. En otro incidente cerca de un campamento de refugiados, una persona murió y varias resultaron heridas, destacando la expansión de los bombardeos a diferentes puntos del enclave.
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Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció que uno de los ataques ocurrió a apenas 250 metros de una de sus clínicas en Gaza, donde se encontraban unos 500 pacientes y cuidadores. “La explosión fue enorme. No recibimos una orden oficial de evacuación de las fuerzas israelíes, nos avisaron los residentes”, expresó MSF en un comunicado. Además, una planta desalinizadora cercana resultó dañada.
La cifra de las personas fallecidas es variante debido a que los bombardeos hacen que miles de cadáveres sigan enterrados bajo los escombros de Gaza, sin que los equipos de rescate puedan recuperarlos por la falta de maquinaria y el peligro de los constantes bombardeos.