Santa Cruz, 22 de junio (Radio Splendid).- El sargento Eustaquio Olanes logró contactarse con su esposa Marina Rojas minutos antes de ser acribillado ayer en la zona del Urubó, Santa Cruz, cuando realizaba un patrullaje de rutina. Le contó a través de mensajes por WhatsApp que se encontraba peligro y que había sido golpeado.
“Me dijo, estoy en peligro, nos vinieron a golpear cuando estábamos patrullando, pero ya estamos a salvo gracias a Dios”, relató la esposa.
Sin embargo, cuando la mujer intentó consultar por la identidad de los agresores, recibió una respuesta que la dejó consternada. “Quienes fueron le pregunté y no me respondió más, después lo último que me mandó fue ‘te quiero mucho amor, te quiero’, esa fue la última conversación que tuvimos”, contó entre lágrimas Rojas.
El sargento Olanes, otro efectivo policial y un voluntario del Gacip fueron acribillados en el municipio cruceño de Porongo. Los asesinos son buscados por la Policía.
