El crudo Brent repuntaba el miércoles desde un mínimo de tres meses a cerca de 57 dólares por barril tras un reporte de la industria que mostró una caída mayor a la prevista de las existencias de crudo en Estados Unidos, y luego de que las negociaciones nucleares con Irán no lograron un acuerdo.
El petróleo había caído bajo una presión bajista debido a que la aceleración de un desplome del mercado bursátil en China y la crisis de deuda griega aumentaron preocupaciones sobre la demanda por combustible.
Las conversaciones en Viena entre Irán y seis potencias mundiales se extendieron más allá de un plazo autoimpuesto, dado que funcionarios en ambas partes dijeron que diferencias importantes estaban impidiendo un acuerdo para levantar sanciones y permitir la entrada de más petróleo iraní en los mercados mundiales.
A las 1010 GMT, el crudo Brent subía 50 centavos, a 57.35 dólares por barril, después de llegar a caer hasta 55.87 dólares por barril. El martes, el Brent bajó a 55.10 dólares por barril, su nivel más débil desde el 6 de abril.
El petróleo en Estados Unidos ganaba 40 centavos, a 52.73 dólares por barril.
Los negociadores en Viena se han dado al menos hasta el viernes para llegar a un acuerdo final sobre el programa nuclear iraní.
Un alto diplomático iraní dijo el miércoles que Teherán no mostraría flexibilidad respecto a los puntos que considera intransables, lo que sugiere que los mercados financieros podrían haber sido demasiado optimistas sobre la posibilidad de un acuerdo.
Los precios eran respaldados por expectativas de que los más reciente datos de inventarios petroleros de Estados Unidos muestren una caída en las existencias de crudo.
El informe de suministro del Instituto Americano del Petróleo (API), publicado el martes, mostró un declive en 958,000 barriles, antes de los datos oficiales que serán publicados el miércoles.
Las acciones chinas se desplomaron el miércoles después de que el regulador de valores del país advirtió que los inversores estaban al borde de un «sentimiento de pánico» y de que los mercados mostraran señales de congelamiento debido a que las empresas suspendieron la cotización de sus acciones.
China es el segundo principal consumidor de petróleo del mundo.
EL ECONOMISTA