La Paz, 26 feb (Radio Splendid).- El ministro de la Presidencia, Yerko Núñez, informó este miércoles que actualmente la situación por la mazamorra y el desborde del río Taquiña en el municipio cochabambino de Tiquipaya está controlada como resultado de la reacción inmediata del Gobierno.
«De manera inmediata el Gobierno nacional ha puesto todos los esfuerzos para poder atender el desastre del momento (…) Gracias a Dios el tiempo nos ha ayudado mucho y no hemos tenido una lluvia que cause zozobra. Está controlado», dijo en conferencia de prensa.
La noche del 21 de febrero, el río Taquiña se desbordó y ocasionó que una mazamorra afectara a varias casas de cinco manzanos de la zona urbana del municipio de Tiquipaya, Cochabamba. El lodo y el agua causaron alarma en los vecinos quienes salieron de sus inmuebles para salvar la vida.
Al menos 200 habitantes resultaron perjudicados por el desastre natural que llamó la atención inmediata de la presidenta Jeanine Añez, quien instruyó a ministros de Estado enviar maquinaria, efectivos policiales y militares para las labores de rescate y limpieza, además de ayuda humanitaria para las familias damnificadas.
Asimismo, a la cabeza de la mandataria, ayer se realizó un minigabinete ministerial en Tiquipaya para evaluar la situación de la emergencia y tomar nuevas acciones.
Culminada la reunión, se determinó la creación de la Autoridad Departamental de Cuencas, la prohibición de asentamientos ilegales en los lechos de los ríos y franjas de seguridad y la reforestación en el lugar.
«Nuestra presidenta en tres oportunidades estuvo en el lugar (Tiquipaya) para poder recibir información y tomar decisiones para que no haya más desastres», dijo el titular de la Presidencia.
Núñez destacó la reacción de las autoridades gubernamentales para prevenir más desastres en el lugar, ya que la inmediata intervención de la maquinaria pesada permitió retirar las piedras y tierra que evitaban el paso de las aguas del río Taquiña.
«Se ha puesto a trabajar más de 20 retroexcavadoras para devolver el caudal al río Taquiña. Si esto no se hacía, las pequeñas lluvias iban a inundar a las poblaciones urbanas», agregó.
Con información de ABI