El Gobierno de Venezuela denunció ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) mediante su misión permanente el despliegue de fuerzas militares estadounidenses en el mar Caribe, calificándolo como una escalada peligrosa y una amenaza directa contra la estabilidad regional.
Entre los buques enviados por Washington se encuentra el crucero lanzamisiles USS Lake Erie y, de forma aún más alarmante, el submarino nuclear USS Newport News, cuya llegada a las cercanías de las costas venezolanas está prevista para los próximos días.
LEE TAMBIÉN: Estos son los momentos claves para entender el proceso del denominado caso «Golpe I»
A través de su Misión Permanente ante la ONU, Caracas reclamó el cese inmediato de estas operaciones militares que, advierte, buscan intimidar y condicionar la soberanía de los pueblos del continente. La declaración también exige garantías claras y verificables de que Estados Unidos no introducirá ni usará armamento nuclear en la región, en violación de tratados internacionales.
Venezuela instó al Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe a convocar consultas urgentes, y recordó que el Tratado de Tlatelolco (firmado por EE. UU.), prohíbe expresamente la presencia de armas nucleares en la región. Además, convocó a todos los Estados miembros de la ONU a respaldar la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, firmada por la CELAC.
La introducción de un submarino nuclear sin informar sobre su carga bélica representa una violación directa de los principios de transparencia y del compromiso histórico con una región libre de armas nucleares. Caracas reitera que estas acciones son incompatibles con el derecho internacional y con la aspiración legítima de los pueblos latinoamericanos de vivir sin amenazas militares ni chantajes hegemónicos.
En paralelo, el canciller venezolano Yván Gil se reunió este martes con Gianluca Rampolla, Coordinador Residente de la ONU en Venezuela. Según comunicó el diplomático venezolano, se le solicitó al órgano internacional el Secretario General de la ONU, António Guterres, “para restablecer la sensatez”, a la vez que les fueron compartidas las “preocupaciones ante el despliegue de unidades militares e incluso armas nucleares de EE.UU. en el Caribe, atentando contra la paz”.

