La Paz, 2 ene (Radio Splendid).- Falleció el periodista Alberto Zuazo Nathes, editor general de El Diario, recibió varios reconocimientos a su labor periodística de más de medio siglo.
Alberto Zuazo Nathes comenzó a trabajar a sus 15 años como mensajero de la Presidencia de la República. Debía ayudar a su madre, que quedó viuda cuando él tenía apenas cuatro meses de vida.
Llegó a ser mensajero gracias a la recomendación de Roberto Hinojosa, quien por sus proclamas revolucionarias murió colgado en la plaza Murillo junto al presidente Gualberto Villarroel.
«Había sido amigo de mi papá, mi madre le pidió ayuda para que yo pueda conseguir un trabajo. Ese señor con buen ánimo consiguió a la semana que fuera el mensajero de la Presidencia de la República”, relató Zuazo, en una de sus últimas entrevistas al periódico Página Siete.
Zuazo Nathes, fue distinguido «Figura Representativa del Periodismo» que le otorgó la Universidad del Valle por su «labor loable y su larga trayectoria», según destacó el rector de esa superior casa de estudios, Gonzalo Ruiz.
“Conocí a Alberto desde hace 61 años, cuando aún imberbe y haciendo mis pininos en éste «hermoso oficio» (Gabriel García Márquez dixit) él ya fungía de Jefe de Información del decano de la prensa nacional. Muchos años después coincidimos en la United Press International (UPI), él como corresponsal en Bolivia y yo en Venezuela. Un hombre completamente entregado al periodismo, sentó cátedra como defensor de la democracia y los Derechos Humanos a lo largo de toda su vida.”.
Hace unos años Alberto Zuazo fue elegido al Tribunal de Honor de la Asociación Nacional de Prensa de Bolivia. El RP José Gramunt de Moragas, destacó «la integridad, experiencia y méritos profesionales» de los elegidos.
En mis archivos tengo decenas de los despachos de Alberto durante los años de la dictadura banzerista y alguna vez releo esos amarillentos papeles que casi han perdido la tinta y me asombro de la habilidad que desplegó para informar al mundo de lo que pasaba en Bolivia. No todos tienen esa destreza para escribir entrelíneas, dadas las circunstancias.
Gonzalo Ruiz recuerda con cariño a uno de los maestros del periodismo «fue un gusto trabajar con él cuando desde Nueva York la compañía me mandó a cubrir la Asamblea Ordinaria de la OEA en La Paz que terminó inesperadamente con el golpe de Estado del coronel Alberto Natucsh Busch.
También trabajé con Alberto en la cobertura del campeonato preolímpico de fútbol disputado en La Paz, pero cuando comprobé su fibra fue durante el golpe de Estado. Nunca perdió la calma. Ni siquiera cuando ametralladora en mano nos sacaron los golpistas de la Sala de Prensa de la OEA. Alberto, además de corresponsal, ocupaba un cargo en Ultima Hora. Desafiando a las balas (y la orden de nuestro jefe en Nueva York, Enrique Durand, de no arriesgar nuestras vidas) nos trasladamos a sus oficinas para usar el teletipo… hasta que otra vez nos descubrieron. Creí perder un hermano cuando dejé a Alberto en medio de esas dos sangrientas semanas y una incierta situación política. Mis superiores me ordenaron volver a Caracas enviando en mi remplazo a Charlie Padilla, desde la oficina de Santiago de Chile. Alberto no podía escoger, ni hubiera aceptado irse. Él siempre estuvo en la primera línea de combate».
Don Alberto como cariñosamente lo recuerda en la redacción de El Diario donde todo empezó, en su carrera periodística de más de medio siglo, Gonzalo Ruiz señala “casi siempre estuvo a cargo de subalternos. Jamás escuché a alguien quejarse de algún maltrato. De conversación agradable, Alberto siempre parece estar más dispuesto a escuchar que a hablar. Lo que tiene que decir, lo hace por escrito. No solo en sus artículos, sino también en libros, alguno de los cuales envié a la biblioteca del Congreso de Estados Unidos.”
El maestro del periodismo dejo una recomendación a los jóvenes periodistas “Inicialmente pedirles mucha lealtad, informar a la sociedad de manera más objetiva, respetuosa. No es necesario utilizar un lenguaje subido de tono cuando con otras palabras se pueden decir las mismas cosas. El periodista tiene que entender que está realizando un servicio público.”.
El 2017 la Asociación Nacional de la Prensa le otorgó el premio «Libertad» por su contribución a la libertad de expresión y prensa en Bolivia.
A lo largo de su carrera, Alberto Zuazo recibió muchas distinciones, quizás si se revisara como informó al mundo de la violación de los DD.HH. en los años 70, se haría aún merecedor del Premio Libertad de Prensa de la ANP. Pero por encima de todo, el mejor premio es el reconocimiento de quienes trabajaron con él, un verdadero «caballero del periodismo».