Tras la aprehensión del expresidente Luis Arce por presunta corrupción, los cocaleros de la región del Chapare, en Cochabamba, reforzarán la seguridad del también exmandatario Evo Morales para evitar que el Gobierno realice su detención.
En conferencia de prensa, el exsenador del Movimiento Al Socialismo (MAS) y representante del sector, Leonardo Loza, sostuvo que la administración del presidente Rodrigo Paz busca “intervenir” la región para aprehender a Morales para desviar la atención de la población del “mal inicio” de su gestión.
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“Nuestra vigilia continúa, más aún, se refuerza para cuidar a nuestro hermano presidente Evo Morales. (…) Porque un Gobierno que empezó a fracasar, a caminar mal, lamentablemente va a querer hacerse pagar como siempre con el movimiento indígena”, aseveró.
Según Loza, con la aprehensión de Arce Catacora comienza una etapa de “cacería de dirigentes”, principalmente, vinculados al movimiento indígena.
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“Sentimos que se viene una cacería a los pueblos indígenas, a los dirigentes de los movimientos sociales. Por supuesto, los que tienen responsabilidades tienen que pagar ante la justicia, no nos oponemos, pero tiene que haber una investigación profunda en cualquier denuncia”, señaló el representante cocalero al referirse a la situación de la exdiputada del MAS, Lidia Patty, quien cumple detención preventiva por el caso Fondo Indígena.
Loza también consideró que la aprehensión de exautoridades tiene por objetivo sosegar la molestia de la población por el incumplimiento de algunas promesas de campaña del presidente Rodrigo Paz, entre ellas resolver la escasez de combustible.
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“La detención del señor Lucho (Luis) Arce es como una medida distracción ante el pueblo boliviano. Paz no resolvió el tema del combustible, en un mes de Gobierno, 3 o 4 bloqueos en contra, particularmente por el tema del combustible, dos muertos acá en Cochabamba, para tapar ese mal inicio de Gobierno creo que ayer detuvieron al señor expresidente de este país, creo que es un mal cálculo”, declaró.
Evo Morales y Luis Arce ejercían los cargos de jefe de Estado y ministro de Economía, respectivamente, cuando estalló el presunto desfalco al Fondo Indígena. El exmandatario fue aprehendido la tarde de este miércoles en La Paz y trasladado a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) donde pasó la noche.
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La Fiscalía alista la imputación formal por los delitos de enriquecimiento ilícito, resoluciones contrarias a la ley, incumplimiento de deberes, uso indebido de influencias y conducta antieconómica. En tanto, analiza la pertinencia de convocar a declarar en calidad de testigo a Morales, quien enfrenta otro proceso por el delito de trata de personas con agravante, debido a una relación que mantuvo en 2015 con una menor de 15 años, de la cual nació una niña en 2016.
Ante ello, Morales permanece hace más de un año atrincherado en la región del Trópico de Cochabamba para impedir su detención.

