La investigación contra el expresidente Evo Morales por el delito de trata y tráfico de personas con agravante continúa, pese al refugio otorgado a la presunta víctima en Argentina, informó la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez.
El Gobierno de Argentina, presidido por el presidente Javier Milei, concedió asilo diplomático desde el 22 de agosto a Cindy S.V., considerada la víctima principal del caso, junto a su hija y su madre, de acuerdo a una resolución de la Comisión Nacional para los Refugiados (Conare) de ese país.
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Gutiérrez indicó que no existe información oficial sobre el tramite realizado en Argentina y que toda la información proviene únicamente de medios de comunicación y redes sociales. “Al no tener nada oficial, no podría referirme a ello como Ministerio Público”, precisó.
“Sea cierto o no, nosotros continuamos con la investigación que se desarrolla acá”, declaró la fiscal departamental.
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Remarcó que un eventual asilo diplomático “no incide en absoluto” en la investigación que se realiza en la ciudad de Tarija y que, llegado el momento, se emitirá una resolución final correspondiente, ya sea una acusación u otra disposición legal.
A la fecha, la Fiscalía cuenta con 18 cuerpos de investigación que apuntan a Morales como principal responsable de sostener una relación sentimental con una menor de edad, mientras ejercía funciones como jefe de Estado, con quien luego habría tenido una hija, precisó la fiscal.
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Gutiérrez recordó que, inicialmente, el proceso no prosperó debido a la falta de colaboración de los familiares de la presunta víctima, quienes se mostraron renuentes a coadyuvar con los actos investigativos.
Morales permanece en la localidad de Lauca Ñ, en el Trópico de Cochabamba, desde octubre del año pasado, tras la emisión de una orden de aprehensión en su contra que aún no fue ejecutada por la vigilia instalada por sectores sociales afines al exmandatario, que buscan impedir su detención.

