Un caso de abuso sexual por parte de un sacerdote jesuita en Colombia ha reavivado las denuncias sobre la pederastia dentro de la Iglesia católica. Hermann Rodríguez, jefe de los jesuitas en Colombia, reconoció este miércoles que el sacerdote Darío Chavarriaga abusó sexualmente de al menos ocho menores en los años 70. Entre las víctimas se encuentra Luis Fernando Llano, quien durante un foro en Bogotá relató cómo él y sus siete hermanas sufrieron abusos en 1976, cuando estudiaban en el Colegio San Bartolomé.
El caso fue conocido por las autoridades de la orden en Colombia, pero las acciones tomadas fueron insuficientes. Francisco de Roux, entonces jefe de la comunidad jesuita en 2014, recibió la denuncia de Llano y decidió apartar a Chavarriaga de su puesto en la Universidad Javeriana. Sin embargo, no presentó la denuncia ante la justicia civil, limitándose a trasladar al sacerdote a una casa donde permaneció bajo restricciones.
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Zollner, uno de los principales expertos en la lucha contra la pederastia dentro de la iglesia católica, renunció en 2023 a la comisión del Vaticano contra los abusos a menores alegando “falta de claridad” en su funcionamiento.
Asimismo, Llano expresó su frustración por la falta de acciones concretas tanto por parte de la jerarquía jesuita en Colombia como del Vaticano, a pesar de haber denunciado los hechos en varias ocasiones durante la última década. ”Han pasado casi 50 años desde los hechos, 10 años casi desde la denuncia al padre de Roux y siete años desde que me encontré con el padre Zollner y se lo dije para que le comentara al papa Francisco. No ha pasado nada”, dijo Llano.
El escándalo se suma a otros casos similares que han sacudido a la Iglesia católica en Colombia, donde al menos seis sacerdotes han sido condenados por abusos sexuales a menores y pese a haber denuncias no se llega a una sentencia para los jesuitas implicados.
