Tener dispositivos con luces RGB o instalaciones que adornen una habitación o un computador es una tendencia de los últimos años, especialmente en la comunidad gamer. Lo que quizás no se sabe, es que esta práctica puede traer varios problemas a futuro.
Este tipo de práctica se ha hecho muy común por la cantidad de creadores de contenido que muestran en sus videos y directos, una habitación llena de luces, dispositivos llamativos por su color y una presencia diferente al entorno gris que puede tener un computador tradicional.
Pero contar con este tipo de luces puede traer afectaciones a los mismos equipos, consumir un alto nivel de energía y no siempre hay garantía de su durabilidad.
Distracción
Iniciamos con un aspecto puede ser poco relevante o que no afecta a todos: la concentración. Instalar una habitación con luces RGB y dispositivos que den un entorno colorido, podría traducirse en problemas para visualizar bien la pantalla.
Esto puede afectar apartados complejos como la calidad de la imagen del juego, hasta situaciones más sencillas como distraerse por la cantidad de colores que hay al rededor y que no nos permiten concentrarnos en lo que tenemos al frente.
Problemas con el sueño
Normalmente, las sesiones de juego son durante la noche o la madrugada, es decir, antes de irse a dormir. Los expertos recomiendan que antes de irse a descansar, la exposición a las pantallas sea la más mínima posible por la luz que proyecta el dispositivo. Por lo que si a este aspecto le sumamos las luces RGB de la habitación, del teclado, del mouse y de la CPU, nuestro sueño se verá afectado.
Durabilidad
Todo dispositivo o componente tiene un tiempo de vida útil, que puede alargarse o acortarse según el uso que se les dé. Las luces RGB tienen un límite y al usarse constantemente, por el calor que producen, pueden dañarse con facilidad.
En la mayoría de casos estos accesorios no se funden por completo, sino que lo que sucede es que van perdiendo brillo o no puede reproducir ciertos colores. Por lo que son componentes delicados y propensos a dañarse rápidamente.
Una cuestión relevante porque estas luces y los dispositivos que vienen con ellas suelen ser los más costosos del mercado, por ese factor estético diferencial.
Ahorro de energía
Este es quizás el punto que más puede hacer pensar a varios. Aunque estas luces no van a consumir más energía que el mismo computador o que un televisor, es un componente que se suma a tener el ordenador prendido, la pantalla, la consola u otros dispositivos adicionales.
Además, muchas veces las luces deben ir conectadas al PC para que se enciendan con él, lo que puede afectar la duración de la batería en los portátiles y con eso su rendimiento. Al final son un accesorio estético, que no aporta en nada al procesamiento.
/Infobae
