El presidente Alberto Fernández anunció esta tarde el DNU con restricciones por la segunda ola del coronavirus, desde los jardines de Olivos. Tal como fuentes del Ejecutivo confirmaron a Clarín, el «toque de queda» virtual será obligatorio para las jurisdicciones más comprometidos con los contagios, entre las 00 y las 6 de la mañana.
Los locales gastronómicos podrán permanecer abiertos hasta las 23. Entre la medianoche y las 6 solo podrá circular el personal esencial y los trabajadores exceptuados. «Hasta las 24 se podrá sacar al perro», bromeaban funcionarios de Casa Rosada.
La dirección de Innovación de Jefatura de Gabinete avanzaría en la emisión y control de nuevos permisos de circulación, como ya hizo en el pasado.
«La Argentina ha entrado en la segunda ola», comenzó Fernández su mensaje.
«Lo que suceda en la segunda ola dependerá de las medias que tomemos, el control en cada jurisdicción y el compromiso de cada integrante de la comunidad», agregó el Presidente.
«Cuidaremos la salud, la recuperación económica y, en todo lo posible, la presencialidad en las escuelas», continuó. Convocó a todos los gobernadores a evaluar el cumplimiento de las medidas, «más allá de cualquier diferencia política».
En ese sentido, el Gobierno delegará en las fuerzas de seguridad locales los controles. «Provincias y la Ciudad reclamaron tener sus fuerzas propias, ahora deben hacerse cargo», habían explicado en el Ejecutivo. Gendarmería y el resto de las fuerzas federales controlarán ferrocarriles y transportes automotores nacionales.
El Ejecutivo enfatiza que los controles serán fundamentales para el cumplimiento de las medidas. Algunos de las distritos más populosos como Mendoza, Córdoba y la Ciudad pretendían que los cierres no fueran excesivos y enfatizar campañas de concientización. La provincia de Buenos Aires, en tanto, reclamaba medidas más duras.
«Debemos unirnos más allá de cualquier diferencia política. Debemos cuidarnos colectivamente. Medidas similares y más restrictivas se siguen tomando en Europa, América Latina y en todo el mundo», comentó Fernández, en su mensaje grabado.
Y advirtió: «Cuanto mayor sea la transmisión y la ocupación del sistema de salud, más medidas restrictivas deberemos tomar».
La nueva norma que emitirá el Gobierno derogará el anterior Decreto que tenía fecha de finalización el próximo viernes 9 de abril.
El martes, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, había asegurado ante la prensa que se podían esperar medidas «tempranas, transitorias y localizadas» para desacelerar la ascendente curva de contagios.
En las oficinas de Casa Rosada explicaron que el decreto incluirá medidas focalizadas para responder a la situación epidemiológica de cada área geográfica.
Actualmente, la evolución de los casos de Covid-19 detectados es definida como de un «aumento sostenido y caracterizado».
En ese sentido, la cartera sanitaria informó que en el transcurso de la última semana casi se duplicaron los departamentos que se encuentran en situación de riesgo.
Las áreas con situación comprometida son el lugar de residencia de casi 25 millones de argentinos, ya que abarcan con especial preponderancia los principales conglomerados urbanos del país.
Así, las medidas que se aplicarán en el Área Metropolitana de Buenos Aires fueron motivo de intercambios y reuniones entre los representantes gubernamentales de la Nación, la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.
El Gobierno bonaerense siempre habló de tres ejes: transporte público, nocturnidad y actividades recreativas. En los tres puntos, mantuvo diferencias con la Ciudad. El equipo de Kicillof pretende tres semanas de rigidez total, con un cierre nocturno de 22 a 6 y que vuelva a ser el transporte solo para trabajadores esenciales.
Quirós afirmó que existe «una mirada común» entre las jurisdicciones sobre la necesidad de «disminuir los encuentros sociales».
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, afirmó que existe «una mirada común» entre las jurisdicciones sobre la necesidad de «disminuir los encuentros sociales, reducir la nocturnidad y cuidar el transporte público», aunque no especificó cuáles serían los detalles.
Mientras tanto, el gobernador Axel Kicillof dijo el martes que, «ante el crecimiento de los casos, las segundas olas y las nuevas cepas, en todos los países se han tomado medidas de este tipo, y aun más estrictas».
El Clarín